Antecedentes:
En los últimos años, México ha construido un entramado normativo, con instituciones y mecanismos que han permitido a la ciudadanía acceder a la información que generan y resguardan los gobiernos. Con estas acciones se ha fortalecido el derecho de acceso a la información y en esta trayectoria se ha sumado recientemente, el concepto de Gobierno Abierto. Dicho concepto se concibe como un principio reformador que busca asegurar que la información generada por las autoridades y sujetos obligados sea socialmente útil para los ciudadanos y que también permita a éstos, una incidencia efectiva en la toma de decisiones de los gobiernos. Bajo esta lógica conviven dos principios clave: transparencia y participación.
La promulgación de la Ley General de Transparencia y Acceso a la Información Pública, permitió que Gobierno Abierto se convirtiera en un principio normativo de actuación y orientación del Sistema Nacional de Transparencia, otorgando también a los órganos garantes (nacionales y locales) atribuciones para promover y coadyuvar, con los sujetos obligados del país, la incorporación de la apertura como parte de su quehacer cotidiano. Por lo anterior, desde el INAI se han impulsado acciones, proyectos y políticas con la finalidad de contar con un entendimiento compartido sobre qué es Gobierno Abierto, así como pautas generales para su implementación en el marco del Sistema Nacional de Transparencia.
¿Qué es la Métrica de Gobierno Abierto?
Ante la incorporación de este principio al andamiaje normativo de transparencia, así como la puesta en marcha de una Política Nacional de Gobierno Abierto, resulta pertinente contar con instrumentos de medición que permitan diagnosticar, analizar y evaluar las condiciones de apertura institucional que prevalecen en los distintos sujetos obligados del país.
La Métrica de Gobierno Abierto es un instrumento que busca medir qué tanto puede conocer el ciudadano lo que realizan sus gobiernos y qué tanto puede incidir en sus decisiones. En este sentido, la Métrica puede concebirse como una radiografía sobre Gobierno Abierto a escala nacional, y sirve de línea base para las políticas en la materia, que han sido implementadas por el INAI y por los demás integrantes del Sistema Nacional de Transparencia (SNT), en el ámbito de sus respectivas competencias.
¿Cómo funciona?
La Métrica de Gobierno Abierto utiliza una metodología novedosa para medir qué tanto puede un ciudadano conocer lo que hacen sus gobiernos y qué tanto puede incidir en sus decisiones. Se compone de dos dimensiones: transparencia y participación ciudadana; y de dos perspectivas: la de gobierno y la del ciudadano.
¿Cómo se obtuvieron los resultados?
De la combinación de estas perspectivas y dimensiones se desprende el instrumento de medición de gobierno abierto, que incluye nueve índices: El índice general es el Índice de Gobierno Abierto, el cual es el resultado del promedio de los subíndices de gobierno abierto desde la perspectiva gubernamental y de gobierno abierto desde la perspectiva ciudadana. A su vez, cada uno de estos índices resulta del promedio de los subíndices de transparencia y participación ciudadana para cada perspectiva.
¿Qué no es la Métrica de Gobierno Abierto?
- No es una medición de la actualización normativa en materia de transparencia.
- No mide de forma exclusiva el cumplimiento de normas o la existencia de procesos.
- No es una evaluación de la Ley General de Transparencia y Acceso a la Información Pública.
- No evalúa el desempeño de los organismos garantes en materia de transparencia y acceso a la información.